lunes, 30 de septiembre de 2013

Acelerando el metabolismo basal.

Hemos visto que el metabolismo basal no es algo que no se pueda cambiar, sino que al contrario con una serie de cambios en nuestros hábitos podemos tener un metabolismo más joven y veloz, y de esta manera podamos perder peso aun descansando o durmiendo.
Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con algunos productos o ‘técnicas’ que prometen acelerar nuestro organismo. En este aspecto, sólo una vida saludable acompañada de disciplina y ganas de mejorar nuestros hábitos, son los factores que nos van a permitir tener un metabolismo basal envidiable, lo que nos hará lucir más jóvenes, delgados y mucho más contentos con nosotros mismos. 

¿Cuáles son estos factores?
Distribución de las comidas. 
El factor principal para acelerar nuestro metabolismo es la distribución de las comidas. Muchas personas tienen la idea equivocada de que para bajar de peso es necesario comer lo menos posible. Esto es totalmente equivocado. 

Una buena dieta no debe ser demasiado restrictiva en cuestión de cantidad de alimentos, claro que esta que un consumo alto de calorías nos va a traer problemas de sobrepeso, pero se puede comer sin pasar hambre y al mismo tiempo bajar de peso.
Entre mayor número de comidas realicemos al día tendremos un metabolismo basal más eficiente. Se recomienda hacer 5 comidas al día para tener un metabolismo basal activo y veloz. 
La razón para esto es que entre más tiempo dejemos pasar entre cada comida, nuestro metabolismo basal se hará más lento para optimizar la energía del organismo. En cambio, cuando hacemos nuestras comidas con regularidad nuestro cuerpo se acostumbra a quemar grasa de manera más eficiente, pues sabe que no tiene que estar cuidando la primera vía metabólica pues pronto llegarán nuevos alimentos. 


No a las dietas extremas. 

Otro factor que influye en la velocidad de nuestro metabolismo basal es si hemos acostumbrado a nuestro organismo a dietas muy extremas. Cuando hacemos dietas de hambre mandamos la señal a nuestro cuerpo de utilizar la energía muy lentamente. 

Imaginemos que necesitamos 2000 calorías diarias para mantener nuestras funciones vitales y para nuestras actividades cotidianas. Si de pronto hacemos una dieta demasiado restrictiva en calorías, nuestro organismo tendrá que hacer malabares para hacer rendir las pocas calorías que estamos consumiendo, y en el corto o mediano plazo hará mucho más lento nuestro metabolismo basal. De hecho, este cambio en la velocidad del metabolismo basal es una de las causas principales del ‘efecto rebote’.
Actividad física. 
Otra de las variables que podemos controlar que afectan a nuestro metabolismo basal es la actividad física. La actividad física regular hace que acostumbremos a nuestro metabolismo basal a ‘estar en forma’. 

Para tratar de ejemplificar esto, imaginemos que nuestro organismo tiene una ‘memoria del metabolismo basal’, cuando acostumbramos a nuestro cuerpo a quemar energía, éste continuará haciéndolo a lo largo del día. En caso contrario, haremos que poco a poco nuestro cuerpo vaya olvidando que necesita estar consumiendo energía de forma eficiente y lo hará de manera contraria, es decir: lentamente. 




lunes, 16 de septiembre de 2013

El metabolismo basal

Muchas personas están confundidas con el término de ‘metabolismo basal’, el cual es un concepto que aún no está muy claro para la mayoría de las personas.
El metabolismo es la forma en que el cuerpo utiliza la energía de los alimentos y la energía almacenada en forma de grasa para hacer las actividades del día con día. En cambio, el metabolismo basal es la rapidez con la una persona quema la energía para hacer las funciones celulares básicas, es decir la energía necesaria para mantener en funcionamiento las funciones vitales del organismo. 
Es común escuchar que las personas jóvenes y con una extrema facilidad para permanecer delgados aunque coman mucho son de “rápido metabolismo”; en realidad, debería decirse que tienen el “metabolismo basal rápido”, ya que su cuerpo quema la energía fácilmente incluso cuando están descansando o cuando están dormidos. 


Es por esto que el metabolismo basal es uno de los factores más importantes para mantenernos en nuestro peso ideal. 

Son múltiples los factores que inciden en que tengamos un metabolismo basal eficiente o que éste sea lento. Genética, edad, actividad física, hábitos alimenticios, entre otros motivos, afectan la velocidad de nuestro metabolismo basal. En algunos de estos factores tales como la genética, no podemos influir. Sin embargo, en la mayoría de los otros aspectos podemos incidir para mejorar la rapidez de nuestro metabolismo basal.

Tipos de cuerpos y su relación con el metabolismo basal.

Existen tres tipos distintos de cuerpos: el endomorfo, el mesomorfo y el exomorfo. Cada uno con características distintas en términos fisiológicos y de complexión física. En general las personas con cuerpo endomorfos tienden a ser delgadas sin mucho esfuerzo, por el contrario los exomorfos son más propensos a padecer problemas de obesidad y sobre peso.
Un nutriólogo nos puede orientar acerca de nuestro tipo de cuerpo y ofrecer algunas estrategias para mantenernos en nuestro peso, pero es probable saberlo a partir de lo grueso o delgado de nuestras muñecas, que es una de las partes del cuerpo que se ven menos alteradas por la presencia de grasa corporal. 

Una muñeca delgada nos habla de un cuerpo endomorfo, una muñeca de tamaño promedio será indicador de un cuerpo mesomorfo, y una muñeca gruesa nos indicará un cuerpo exomorfo.
Las estrategias para mejorar la rapidez de nuestro metabolismo basal, las estaremos discutiendo en próximas entradas.

jueves, 5 de septiembre de 2013

Calorías quemadas por hora en distintas actividades

¿Te has preguntado cuáles son los deportes que te ayudan a quemar más calorías?, les dejamos una lista que será de mucha utilidad para calcular nuestro gasto energético a partir de distintas actividades rutinarias o deportes.

Subir escaleras es una de las formas más rápidas de quemar calorías

Actividad física Calorías quemadas por hora
Subir escaleras 780
Remar 750
Judo 720
Correr 650
Patinaje sobre ruedas 630
Patinaje sobre hielo 620
Footing 600
Alpinismo 540
Tenis 520
Basquetbol 510
Montar a caballo 510
Esquí 500
Nadar 500
Hockey 490
Caminar rápido 440
Bajar escaleras 420
Caminar a paso fuerte 360
Aerobics 350
Hacer jardinería 350
Paseo rápido 300
Bicicleta 300
Caminar normal 300
Baile 260
Badminton 250
Pesca 220
Bolos 210
Golf 210
Hacer tareas domésticas 200
Voleibol 180
Caminar lento 130
Conducir 100
Sentarse a la mesa de trabajo 100
Ver la TV 100


lunes, 2 de septiembre de 2013

Alimentación y celulitis

La celulitis es un problema de muchas dimensiones, una de las más importantes es la alimentación. Podríamos hablar de muchísimos factores que inciden en los casos de celulitis, muchos de los cuales no podemos controlar como la genética o la facilidad natural para subir y bajar de peso, pero la alimentación es algo que está en nuestras manos y que podemos mejorar.

Evitar los alimentos que contribuyen a tener más celulitis es una buena elección, sólo que no es necesario hacer un cambio radical que termine por aburrirnos y que volvamos a caer en lo mismo. Podemos darnos nuestros gustos de vez en cuando, ningún alimento es tan malo como para evitarlo de por vida. El problema es el exceso, si mantenemos una alimentación basada en el plato del buen comer no deberíamos de tener problemas con la alimentación. 


celulitis


Los alimentos que están fuertemente relacionados con la aparición de celulitis son los siguientes:

Comida con mucho contenido de sal, grasa o azúcares: La comida rápida, comida chatarra, las frituras, la garnacha. Toda estos alimentos que abundan en nuestra época son gran parte del problema del exceso de personas que tienen celulitis en nuestros días. Reducir nuestro consumo aceite y sal está relacionado a mejoras en el aspecto de la celulitis.

Harina no integral: La harina procesada además de su gran contenido calórico tiene una alta incidencia en la aparición de la celulitis. Si bien son una fuente de carbohidratos esenciales para nuestros requerimientos de energía, podemos reducir su consumo gradualmente y cambiar hacía las harinas integrales. Otra opción, si nos gusta mucho el pan y el bolillo es mejorar nuestra actividad física ya que este tipo de alimentos son la primera opción de nuestro metabolismo para usarlos como energía.

Refrescos: El exceso de azucares y el nulo aporte nutricional de los refrescos nos hacen incluirlos en la lista negra de la celulitis. Además, el gas contenido en ellos está relacionado con la celulitis.

Carnes frías: El exceso de grasa procesada de este tipo de carnes representan un aumento en los casos de celulitis en relación a las personas cuyo consumo de éstas es menor. Así que las salchichas, el tocino y el jamón debemos de consumir con moderación.

Por otro lado los alimentos positivos para reducir la celulitis son las frutas, verduras, leguminosas y el agua natural.

La prevención es la forma más sencilla de combatir la celulitis, ya que una vez que esta aparece tenemos que hacer una batalla de varios frentes para tener que controlarla, uno de estos frentes es la alimentación, así que es mejor idea darle una ayudada a nuestros hábitos alimenticios antes de que la celulitis aparezca. Aunque nunca es tarde para cambiar. Hemos aprendido que alimentación y celulitis son dos cosas que van de la mano.